¿Un rostro de otro mundo, o una chica totalmente terrenal?

Bien, este texto que van a poder leer a continuación, está transcrito literalmente de la fuente de origen, y nos llega desde un familiar muy cercano.
Dado que es un hecho muy curioso, lo compartimos, indicando inicialmente que sucedió hace más de 20 años en la ciudad de Palma de Mallorca (España).


"Circulaba a eso de las 13:00h, por la calle Balmes, por el segundo carril por la derecha, en dirección a la carretera de Sóller.

Al llegar al cruce con la calle Eusebio Estada, con el semáforo en verde, no paré, seguí, crucé la la vía del ferrocarril, y en el cruce de las dos calles que había a mi derecha, a punto de bajar de la acera, en sentido contrario al mío, en dirección hacia la gasolinera, vi a dos personas, a la derecha una monja con su hábito, y de su mano, una mujer muy joven.

Cruce de la calle Balmes con Eusebio Estada, donde se encontraban la monja y la joven mujer.

Su visión me duró tan solo unos segundos, pero el aspecto de aquella joven, que era mucho más alta que la monja, me quedó grabado fotográficamente en la memoria.

Su frente era plano arqueada, y formaba un conjunto casi triangular con las mejillas, la boca pequeña y los ojos bastante grandes.
Su cabello era oscuro y bastante poblado, caído casi recto a cada lado del rostro.

La monja la llevaba cogida de manera protectora, ya que la vi como un ser desvalido, necesitado de protección.

Pensé que era una de esas criaturas, que a veces la naturaleza crea con algún error de la genética humana.
He pasado por ese mismo cruce cientos de veces, pero jamás la volví a ver.

Mi mente científica siempre me dirá que era un ser humano.
Mis ojos y la impresión que me causó, no."


Esta anécdota la hemos podido escuchar repetidas veces de esta misma persona, y debemos indicar que siempre indica los mismos lugares y detalles, es una persona escéptica en estos temas y con una arraigada mentalidad científica, por tanto da más validez al suceso.

Y tras escucharla repetidas veces, la imagen típica de un ser de otro mundo siempre nos viene a la mente, pues la descripción encajaría perfectamente con la faz de un ser que no fuese de nuestro mundo. Incluso si conocemos casos, historias y leyendas, la descripción de esa extraña joven, entraría en las descripciones que daba David Huggins sobre las "mujeres" que le visitaban.

Retrato realizado por el propio David Huggins de una de las "mujeres" que supuestamente le visitaba frecuentemente para conseguir muestras de esperma. Fuente: www.disclose.tv

Pero siendo más realistas y ciñéndonos a una explicación más científica, esa descripción encaja perfectamente con los rasgos de una persona que hubiera nacido con "Acromegalia", una enfermedad crónica y genética que afecta a la pituitaria, provocando gigantismo en manos, pies o rostro de la persona que la padece.

Mujer con el rostro con síntomas visibles de Acromegalia avanzada. Fuente: www.atusaludenlinea.com

Por tanto, si nos ceñimos a la descripción dada, la joven mujer podría haber estado afectada por Acromegalia desde joven, haciendo ver a este familiar a un posible ser de otro mundo, que realmente era más terrenal que lo que la imaginación le hacía ver.